Quito, 17 sep (Prensa Latina) Un bus de transporte de pasajeros fue incendiado hoy en la localidad ecuatoriana de Huaquillas, provincia de El Oro, mientras estaba guardado en un garaje, y en su interior se encontraban el conductor y el ayudante.
Según reportes de medios locales de prensa, hombres desconocidos atacaron el vehículo con una bomba molotov casera cuando los dos ocupantes del bus descansaban.
El conductor fue trasladado a un centro de salud pero debido a la gravedad de las quemaduras, falleció. Mientras tanto, el ayudante permanece hospitalizado.
De acuerdo con el jefe de Policía de Huaquillas, Walter Villacís, las compañías de transporte de la zona son víctimas de amenazas, por lo que el crimen podría estar ligado a extorsiones de grupos delincuenciales.
El pasado 29 de julio, conductores de transporte público de Ecuador realizaron una caravana en esta capital para solicitar al Gobierno acciones contra la inseguridad en las vías del país.
«Delincuente no me mates tengo familia», una de las consignas que mostraron las pancartas en los vehículos que participaron en el recorrido este lunes.
Líderes de la Federación Nacional de Asociaciones de Conductores Profesionales informaron que la protesta obedeció a los constantes asaltos, robos y extorsiones que sufren a diario.
Uno de los últimos crímenes que estremeció al país tuvo lugar en la noche del 18 de julio, cuando un grupo de delincuentes asaltaron un autobús interprovincial, dispararon contra los pasajeros y asesinaron a un niño de seis años y también a cuatro adultos.
En Ecuador rige una declaratoria de conflicto armado interno, disposición con la cual el presidente Daniel Noboa acompaña desde enero pasado una serie de decretos de estado de excepción para frenar la inseguridad y el crimen organizado.
A pesar de la presencia militar en las calles, persisten las muertes violentas, extorsiones y otros delitos, mientras crecen las preocupaciones por el exceso en el uso de la fuerza en el combate a los grupos criminales.